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Las personas han estado utilizando arcilla para la piel durante siglos para mejorar tanto la salud del rostro y el cuerpo como la del cabello.
Las mascarillas faciales de arcilla están elaboradas con diferentes clases de arcilla como el caolín o la bentonita.
Se cree que, dependiendo de la arcilla utilizada, cuentan con varios beneficios como absorber el exceso de grasa, ayudar a controlar la piel seca o prevenir el acné.
Pero no todas las arcillas son iguales, ya que varían en composición mineralógica, química, color y origen.
Sin embargo, cada día son más los estudios que respaldan los beneficios que ofrecen las arcillas en el cuidado no solo de la piel, sino también del cabello.
Beneficios de la arcilla para el acné
La mascarilla de arcilla verde tiene el potencial de absorber el aceite de la piel y prevenir formas leves de acné como granos, puntos negros y puntos blancos.
Estos tipos de acné se forman cuando los poros se obstruyen debido a un exceso de suciedad y grasa.
Las mascarillas de arcilla ayudan a destapar los poros evitando, de este modo, infecciones bacterianas o que la suciedad se quede atrapada en el interior.
Además, aplicándolos mediante calor aumenta la transpiración y facilitan la apertura de los poros para una mayor limpieza.
Principalmente la arcilla verde se caracteriza por combinar illita y montmorillonita, dos variedades de arcilla verde especialmente indicados para las pieles grasas.
La arcilla para la dermatitis
A pesar de que tradicionalmente la arcilla se haya utilizado para ayudar a regular o mejorar el aspecto de las pieles grasas gracias a su riqueza en minerales, también es beneficiosa para otras alteraciones de la piel.
La bentonita es una arcilla que cuenta con funciones desintoxicantes y regenerantes y algunos estudios sugieren que es capaz de aliviar los desórdenes cutáneos como la dermatitis atópica.
Asimismo, también se ha observado que la aplicación de bentonita en la dermatitis del pañal es más efectiva que un tratamiento tradicional de caléndula y que ayuda a absorber el exceso de humedad, lo que favorece la reparación.
Sus propiedades regeneradoras pueden ayudar a tratar úlceras y cortes gracias a la ayuda que ofrece a la hora de mejorar la producción de fibras de colágeno, lo que a su vez puede reducir las arrugas y aumentar la firmeza de la piel.
Mascarilla de arcilla para pieles secas
La arcilla roja o rosa es una de las más recomendadas a la hora de tratar las pieles secas.
Según un estudio de 2016, la arcilla crea una película que puede ayudar a la piel a retener la humedad.
Sin embargo, hay que utilizarla con cautela, ya que dejar que la arcilla se seque por completo sobre la piel tiene el potencial de resecar.
A la hora de utilizar las arcillas es importante no dejarlas reposar más de cinco o diez minutos y no dejar nunca que se seque debido a que, en ese caso, puede llegar a absorber la humedad de la piel y provocar una mayor sequedad.
Para ello, se puede rociar la mascarilla con agua o diferentes hidrolatos o aguas florales a medida que se vaya secando.
Beneficios de la arcilla de caolín
El caolín es una de las principales arcillas que se pueden encontrar en la actualidad en el mercado.
Si bien no es ideal para la piel seca, puede ser de gran ayuda para las personas con piel grasa y propensas al acné.
El caolín absorbe el exceso sebo y evita que los poros se obstruyan. Se utiliza, sobre todo, para extraer impurezas y toxinas de los poros.
Además, limpia la suciedad de la piel, el exceso de grasa y la contaminación sin causar enrojecimiento ni irritación.
Debido a sus propiedades bactericidas, la arcilla de caolín también puede ser útil en los tratamientos de acné, en especial cuando se combina con el aceite de jojoba.
Los minerales de la arcilla de caolín pueden eliminar secreciones, aceites y contaminantes de la piel. Sirve como un agente limpiador y refrescante al absorber la humedad y las impurezas y al reducir de este modo las imperfecciones.
Posibles efectos secundarios y precauciones con la arcilla
Es poco probable experimentar efectos secundarios graves después de aplicar una mascarilla de arcilla sobre la piel.
No obstante, si se deja la mascarilla de arcilla por mucho tiempo o si se utiliza con demasiada frecuencia, la piel puede secarse, irritarse o derivar en enrojecimiento, picazón o erupción.
Siempre es importante tener en cuenta que la arcilla es un ingrediente que va en busca del agua, por lo que tiene que estar húmeda para que la epidermis pueda absorber todos sus minerales y prevenir la sequedad.
Por eso, es importante prestar atención a las señales que da la piel y dependiendo de sus necesidades aplicar la mascarilla una vez a la semana, dos veces a la semana o una vez al mes.
Bibliografía:
Velasco, Maria & Zague, Vivian & Dario, Michelli & Nishikawa, Deborah & Pinto, Claudineia & Almeida, Mariana & Trossini, Gustavo & Vieira-Coelho, Antonio & Baby, André. (2016). Characterization and Short-Term clinical study of clay facial mask. Revista de Ciencias Farmaceuticas Basica e Aplicada. 37.
Moosavi, Maryam. “Bentonite Clay as a Natural Remedy: A Brief Review.” Iranian journal of public health vol. 46,9 (2017): 1176-1183.
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