Índice de contenidos
¿Existen coincidencias entre piel seca y piel deshidratada? ¿Podemos utilizar ambos términos por igual o su significado es distinto? En Siéntete Guapa queremos ayudarte a encontrar las respuestas a estas preguntas.
Y es que, en muchas ocasiones, la piel deshidratada se utiliza como sinónimo de piel seca. Sin embargo, estos dos fenómenos son conceptos completamente diferentes.
La piel deshidratada se caracteriza por ser una piel que carece de agua. Puede estar tirante, con picazón y, quizás, también cuente con un aspecto opaco.
El tono y complexión general pueden parecer desiguales y las finas líneas de expresión son más notables. Si bien la piel deshidratada puede ser una molestia, es relativamente fácil de tratar con un estilo de vida correcto.
El proceso comienza desde dentro hacia fuera para reponer y mantener la hidratación en todo el organismo.
Antes de conocer las diferencias entre piel seca y piel deshidratada, recuerda que a través de este blog de belleza también podrás averiguar cuáles son los beneficios del bicarbonato de sodio para la piel.
Piel deshidratada y piel seca: ¿en qué se diferencian?
Descubrir si piel seca y piel deshidratada son lo mismo te ayudará a saber cuáles son los tipos de mimos y cuidados que requiere cada tipo de cutis.
Mientras que la piel deshidratada carece de agua, la piel seca está falta de aceites naturales (también llamado sebo).
Además, la piel seca es un tipo de piel, mientras que la deshidratación se considera una condición que puede ser temporal.
Las clases de piel se clasifican en normales, secas, mixtas y grasas. Por lo general, se nace con un tipo de piel, pero este puede cambiar con la edad y la estación.
Cuando se tiene la piel seca, las glándulas sebáceas no producen suficientes aceites naturales para mantenerla en óptimas condiciones.
La piel, por regla general, necesita ayuda y una hidratación adicional para protegerse de una mayor pérdida de humedad. Los signos de una piel seca incluyen:
- Piel escamosa
- Copos blancos
- Rojez
- Irritación
- Tirantez
A veces algunas afecciones de piel como psoriasis, eccema, medicación o incluso brotes post acné pueden causar la sequedad de la piel, pero esto no significa que en esos casos la clase de piel cambie a seca o esté deshidratada.
Según su definición, la deshidratación significa que el cuerpo está perdiendo más agua de la que está ingiriendo.
Además de no beber suficiente agua, puede estar relacionado con un aumento de la cafeína o los diuréticos. También puede ocurrir durante la sudoración al realizar mucho ejercicio físico.
Si te preguntas cuáles son las diferencias entre piel seca y piel deshidratada, será importante que sepas que esta última puede traer consigo los siguientes síntomas:
- Picor
- Falta de brillo, opacidad
- Círculos más oscuros debajo de los ojos
- Ojos hundidos
- «Sombras» alrededor de la cara (en especial debajo de los ojos y alrededor de la nariz)
- Mayor cantidad de líneas finas y arrugas superficiales
Cómo evaluar si la piel está deshidratada
Se puede realizar una simple prueba en casa para determinar los niveles de hidratación de la piel.
En primer lugar, se debe tomar una pequeña porción de la piel que se encuentra alrededor del área de las mejillas y apretarla con suavidad.
Hecho esto, si se nota alguna arruga y la piel no se recupera después de soltarla, entonces es probable que esté deshidratada.
Cómo tratar la piel deshidratada
A diferencia de la piel seca, la deshidratación se puede tratar con cambios en el estilo de vida.
Reponer la hidratación es el primer paso importante, por lo que es esencial beber mucha agua. Se puede comenzar con la antigua regla de tomar ocho vasos de agua al día si no se bebe suficiente líquido.
Dependiendo del peso corporal y de los niveles de actividad, es posible que se necesite beber una mayor cantidad de agua.
Asimismo, es importante buscar el equilibrio y no beber demasiada agua, ya que un exceso puede conducir a una pérdida de minerales. Comer frutas y verduras ricas en agua también puede ayudar a aumentar su consumo.
Por otra parte, se puede tratar la piel deshidratada con los siguientes cambios en la dieta y el estilo de vida:
- Dejar de consumir bebidas alcohólicas
- Beber menos café y otras fuentes de cafeína
- Dejar de fumar
- Hacer ejercicio con regularidad
- Beber agua mientras se hace deporte (por norma general se recomienda tomar unos sorbos cada 20 minutos como mínimo). La sed durante el ejercicio es síntoma de que el organismo comienza a deshidratarse, por eso es importante empezar a beber agua antes de que aparezca
- Reponer los líquidos después de hacer ejercicio
- Dormir lo suficiente
- Comer más alimentos de origen vegetal, tales como frutas, verduras y legumbres
Además, en caso de enfermedad reciente, la deshidratación puede estar relacionada con la pérdida de líquidos durante ese periodo.
Cómo tratar la piel seca
Adoptar una correcta rutina para evitar la deshidratación no significa que la piel seca mejore, ya que esta clase de cutis es más difícil de tratar.
Ante una piel que ha estado naturalmente seca, es probable que se deba maximizar el cuidado para retener la humedad, sobre todo durante el clima frío y seco.
Una crema hidratante o un aceite vegetal adecuado ayudará a mejorar la función de la barrera hidrolipídica de la piel reteniendo la humedad y regulando la actividad de las glándulas sebáceas.
En estos casos, saber para qué sirve la crema nutritiva te podrá ser de gran ayuda y utilidad.
Asimismo, seleccionar productos que estén específicamente indicados para cuidar las pieles secas también es clave para estimular los aceites que se encuentran de manera natural sobre la piel sin hacerla demasiado grasa.
Con una rutina adecuada y unos cuidados básicos se puede ayudar a mejorar tanto la piel deshidratada como la piel seca y devolverle al organismo todos los nutrientes necesarios para contar con una tez sana.
Ahora que conoces las principales diferencias entre piel seca y piel deshidratada, recuerda que, si quieres presumir de una tez radiante, también será indispensable que sepas cómo tener una piel de porcelana siguiendo unos sencillos pasos.
Deja tu comentario