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El acné es una afección de la piel muy común que principalmente genera espinillas en el rostro, la frente, el pecho, los hombros y la parte superior de la espalda.
Hay una gran variedad de razones por las que se desarrolla, que incluyen la genética, las variaciones en los niveles hormonales, el estrés, la alta humedad y el uso de productos de cuidado personal comedogénicos que obstruyen los poros.
Por ello, es de suma importancia seleccionar productos para el acné específicamente formulados para mantener el cutis limpio, reforzar la barrera hidrolipídica y prevenir la deshidratación cutánea.
El acné comúnmente afecta a los adolescentes, pero puede aparecer a cualquier edad. De hecho, el acné en adultos también es muy habitual.
¿Qué es el acné?
El acné es una afección cutánea frecuente en la que los poros de la piel se bloquean con sebo, cabello, bacterias y células muertas.
Este bloqueo evita que la piel respire y produce puntos negros, espinillas, nódulos y otros tipos de molestos granos.
En la actualidad, el acné se encuentra entre las afecciones cutáneas más comunes.
Se estima que el 80 % de las personas de 11 a 30 años desarrollarán al menos una forma leve de acné y la mayoría de las personas se verán afectadas en algún momento de sus vidas.
¿A quién afecta el acné?
El acné es una alteración principalmente relacionada con los adolescentes y adultos jóvenes que experimentan cambios hormonales.
Algunas personas continúan luchando contra el acné hasta los 20, 30 años y más, incluso hay quienes desarrollan acné por primera vez cuando ya son adultos.
¿En qué zonas se desarrolla el acné con mayor frecuencia?
Los lugares más comunes en los que se puede tener acné son el rostro, pecho, hombros y la parte superior de la espalda.
Las glándulas sebáceas están por todo el cuerpo, sin embargo, esos son los lugares donde se pueden encontrar en mayores cantidades.
La mejor forma de tratar el acné en adultos es identificar su gravedad. El acné puede ser leve (donde se pueden encontrar algunos granos ocasionales), moderado (cuándo hay pápulas inflamatorias) o severo (nódulos y quistes).
¿Cuáles son los diferentes tipos de acné?
Entre los principales signos del acné se encuentran:
- Espinillas: bultos abiertos en la piel que se llenan de piel muerta y exceso de grasa.
- Puntos blancos: bultos que permanecen cerrados por el aceite y la piel muerta.
- Pápulas: pequeñas protuberancias rosadas o rojas que pueden llegar a inflamarse.
- Pústulas: espinillas con pus. Parecen puntos blancos que se encuentran rodeados por anillos rojos. Si se rascan pueden causar cicatrices.
- Acné por hongos (foliculitis por pityrosporum): sucede cuando se desarrolla un exceso de levadura en los folículos pilosos de la piel. Pueden causar inflamación y picazón.
- Nódulos: profundos granos sólidos que se encuentran en la piel. Son grandes y dolorosos.
- Quistes: granos llenos de pus que pueden causar cicatrices.
¿Qué causa el acné en adultos?
El acné es en gran parte una alteración hormonal (hormonas andrógenos como la testosterona) que por norma general se activan durante la adolescencia o la adultez joven.
La sensibilidad a dichas hormonas combinada con los ácidos grasos dentro de las glándulas sebáceas y las bacterias de la superficie de la piel pueden desarrollar acné.
Asimismo, algunos elementos pueden causar acné y / o empeorarlo son:
- Fluctuación en los niveles hormonales de las mujeres alrededor del período.
- Rascarse o explotar las llagas del acné.
- Prendas de vestir y tocados como cascos deportivos, sombreros o mascarillas.
- Contaminación del aire y algunas condiciones climáticas como alta humedad.
- Usar productos de cuidado personal comedogénicos (que obstruyen los poros) o trabajar en un entorno donde habitualmente se entra en contacto con la grasa (como algunos restaurantes).
- El estrés. Puede aumentar la hormona cortisol que también puede provocar un brote de acné.
- Algunos medicamentos.
- Genética.
¿El chocolate provoca acné?
Algunos estudios recientes han relacionado determinados alimentos y dietas con el acné.
La proteína de suero, leche descremada y las dietas altas en azúcar pueden contribuir a los brotes de acné.
En su mayor parte, son los cambios hormonales en el organismo los que provocan el acné.
No obstante, existe alguna evidencia de que una mala alimentación puede ser otro de los factores de su desarrollo.
Llevar una dieta equilibrada y nutritiva con muchas frutas y verduras frescas, en especial aquellas ricas en vitamina C y betacaroteno, ayuda a reducir la inflamación.
¿Puede el acné causar cicatrices?
En ocasiones, el acné puede provocar cicatrices. Principalmente sucede cuando el acné penetra en la piel y daña las capas más profundas de la dermis.
La inflamación hace que los poros se hinchen y rompan su pared.
Las cicatrices pueden atenuarse cuando son recientes por lo que una rutina adecuada podría ayudar a disminuir dichas marcas.
¿Cómo de grave puede llegar a ser el acné?
Los dermatólogos clasifican el acné por severidad en los siguientes rangos:
- Grado 1 (leve): principalmente se trata de puntos blancos y negros con algunas pústulas y pápulas.
- Grado 2 (acné moderado o pustuloso): múltiples pústulas y pápulas que se encuentran principalmente en la cara.
- Grado 3 (acné moderadamente severo o noduloquístico): numerosas pústulas y pápulas que se encuentran junto con nódulos ocasionalmente inflamados. El pecho y la espalda también pueden verse afectados.
- Grado 4 (acné noduloquístico severo): numerosos nódulos grandes dolorosos e inflamados junto con pústulas.
También será interesante que descubras cuáles son algunos de los mejores alimentos para prevenir la aparición de acné.
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