Sara SantoyoÍndice de contenidos
El uso de protectores solares ayuda a tu salud de varias maneras: te protege de las radiaciones del sol (rayos UVB y UVA), retrasa el envejecimiento y reduce el riesgo de padecer cáncer de piel, así como la magnitud de las quemaduras solares.
En la actualidad, la oferta de estos productos es muy amplia, por lo que existen diferentes formatos de protectores solares, tales como cremas, geles y aerosoles, entre otros.
También poseen distintas graduaciones de acuerdo al factor de protección solar (FPS), así como diversos tamaños, diseños, marcas y calidades de estos elementos fotoprotectores.
Para que puedas elegir el protector solar correcto, de acuerdo a tus necesidades, desde superguapas.es nos muestran un recuento de sus principales presentaciones y sus beneficios.
Cómo elegir el tipo de protector solar idóneo para ti
Hoy en día, el mercado pone a nuestra disposición una gran diversidad de protectores solares. Solo tienes que escoger el que mejor se adapte a tu piel, tus preferencias y tus necesidades.
En crema
Es el más conocido y el que más ha evolucionado. Años atrás, los protectores solares no tenían un olor agradable y dejaban un aspecto blanquecino y grasoso en la piel.
Sin embargo, las nuevas generaciones de protectores solares en crema tienen texturas fluidas y brindan un acabado mate.
Algunos productos, además de proteger de los rayos solares, aportan otros beneficios; por ejemplo, tienen color, por lo que podrían sustituir la base de maquillaje; otros brindan una acción antimanchas y algunos combaten pieles grasas y con tendencia al acné.
En gel
Los protectores en gel tienen una textura más liviana que los filtros en crema, pero a veces pueden resultar un poco aceitosos. No obstante, también influye la marca del producto y la calidad del mismo.
En polvo
Los protectores solares en polvo están cobrando mucha fuerza gracias a que son fáciles de aplicar. Además, una de sus grandes ventajas es su formato, ya que es pequeño y discreto, por lo que es posible guardarlo con facilidad en el bolso y llevarlo a todas partes.
Por otro lado, pueden servir como base para la piel, ya que muchos de ellos tienen color. Eso sí, no olvides que el protector solar en polvo se aplica sobre el maquillaje.
No obstante, si deseas extenderlo directamente el único requisito será que tu piel se encuentre limpia, seca e hidratada.
En cápsulas
Los protectores solares en cápsula son complementos alimenticios con nutrientes que contribuyen a la fotoprotección celular. Su fórmula mejora la tolerancia a la radiación solar.
Por regla general, contienen vitaminas, betacarotenos y otras sustancias como el polypodium leucotomos que mejoran la tolerancia de la piel al sol.
Se deben tomar antes, durante y después de exponernos al sol. De acuerdo a cada producto, pueden ser una o dos cápsulas diarias. Algunos especialistas recomiendan complementar con un protector tópico.
No obstante, también es importante recalcar que a día de hoy existen muchos especialistas han cuestionado su efectividad.
En spray
Los protectores solares en spray son muy prácticos cuando necesitamos proteger todo nuestro cuerpo, por ejemplo, cuando vamos a la playa o de excursión. Muchas presentaciones son a prueba de agua y de sudor.
A diferencia de otras presentaciones, con el spray bastan unos cuantos disparos para esparcir el producto en grandes superficies.
Por todo lo mencionado, es fundamental que cuando vayas a comprar un protector solar busques un producto que te ofrezca cobertura UV de amplio espectro y tenga un factor de protección solar o SPF de al menos 15.
Si bien el sol es fuente de vida, es indispensable ser conscientes de sus riesgos, por lo que debemos incluir en nuestra rutina de belleza diaria el uso del protector solar para disfrutar de él sin peligros.
El rostro, el cuello, el escote y las manos son las áreas más expuestas, así que es esencial que comiences desde hoy mismo a protegerlas.
Recuerda que el protector solar no bloquea el sol o dura más de dos horas, por lo que debes revisar la etiqueta para saber si tienes que volver a aplicar el producto cada 40 u 80 minutos.
Solo así podrás seleccionar el mejor protector solar para mimar, proteger y cuidar tu piel. Y tú, ¿por cuál te animas?
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