Cómo cuidar las lentes de contacto paso a paso

Proteger la salud ocular y mantener los ojos en perfecto estado durante muchos años pasa por saber cómo cuidar las lentes de contacto, diseñadas para corregir infinidad de problemas visuales en cuestión de segundos.

¿Qué son las lentes de contacto?

Las lentillas o lentes de contacto se pueden definir como una pequeña y fina lente que se sitúa justo encima de la película lagrimal que rodea la superficie del ojo, en concreto la zona de la córnea.

El objetivo de las lentes de contacto se centra en corregir errores refractivos, ver lo que hay alrededor con total claridad y ayudar a quienes las emplean a gozar de una excelente salud ocular sin necesidad de recurrir a las gafas.

En la actualidad, existe un amplio abanico de lentes de contacto en el mercado y, si decides visitar tiendas on-line como visiondirect.es, por ejemplo, te darás cuenta de que es posible adquirir lentillas diarias, blandas, de hidrogel de silicona e, incluso, de color.

Sea cual sea el tipo de lentilla que hayas escogido, saber cómo cuidar las lentes de contacto paso a paso se convertirá en algo esencial para ti si te has propuesto alargar su vida útil y proteger tu salud visual al mismo tiempo.

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Pasos a seguir para cuidar las lentes de contacto

Descubrir cuáles son los cuidados que las lentes de contacto necesitan te ayudará a ahorrar dinero en la compra de nuevas lentillas, a proteger tus ojos y a prevenir multitud de problemas oculares.

El lavado de manos

Lavarse las manos es una acción tan sencilla como necesaria, y no solo para cuidar las lentillas, sino también para prevenir la aparición de una amplia variedad de virus y enfermedades.

De ahí la importancia de realizar un exhaustivo lavado de manos antes de colocar las lentes de contacto en los ojos usando, a ser posible, jabones naturales que no contengan sustancias que puedan irritar la zona de los ojos.

Una vez que tus manos estén limpias y completamente secas, ya podrás centrarte en ubicar las lentillas en la superficie del ojo.

Los productos idóneos

Las lentillas que se venden en las ópticas y tiendas especializadas suelen ir acompañadas de un estuche en el que deben reposar durante la noche para limpiarse y estar perfectas al día siguiente.

Algunas personas consideran que el agua del grifo es apta para llevar a cabo dicha limpieza, pero pensar eso es un gran error.

Recuerda que las lentes de contacto solo se deben limpiar haciendo uso de líquidos y productos que hayan sido especialmente creados para eliminar los restos de suciedad de las lentillas.

Ten en cuenta, asimismo, que deberás limpiar las lentes de contacto todos los días justo después de quitártelas.

Antes de dormir

Es probable que hayas invertido varias horas de tu tiempo en la búsqueda de ofertas en el precio de lentillas diarias y que, finalmente, hayas encontrado la promoción idónea para ti.

Ahora, ha llegado el momento de poner en práctica trucos y consejos que te ayuden a prolongar la vida útil de esas lentes de contacto que acabas de adquirir.

En este sentido, otra acción a realizar consiste en retirar las lentes de los ojos todas las noches antes de dormir.

Si no lo haces, despertarás con la mirada enrojecida, pondrás en riesgo tu salud ocular y estropearás las lentillas. Tenlo muy en cuenta.

No usar las lentillas más tiempo del recomendado

Antes de salir al mercado, las lentes de contacto pasan por exhaustivos estudios clínicos que analizan una gran diversidad de aspectos y que determinan su duración, en especial cuando se trata de lentillas desechables o renovables.

Asegúrate de leer con detenimiento las instrucciones de uso para saber durante cuánto tiempo puedes emplear las lentes que has comprado y de no recurrir a ellas durante más días, ya que podría ser perjudicial para tu salud ocular.

Cuidado con el agua

Los baños en la playa, los días de natación en la piscina e, incluso, las duchas en casa, pueden estropear las lentillas y hacer mella en la salud de los ojos.

Si te preguntas cómo cuidar las lentes de contacto, desde Siéntete Guapa te recomendamos que te quites las lentillas antes de realizar las actividades acuáticas que acabamos de enumerar, siempre y cuando sea posible.

Ten en cuenta, asimismo, que las lentes de contacto también se pueden acabar deformando con el paso del tiempo, por lo que será fundamental que visites a tu óptico u oftalmólogo con regularidad para averiguar si tus lentillas están en buen estado o si, por el contrario, necesitan un cambio.

Ahora que sabes cómo cuidar las lentes de contacto, el siguiente paso se centrará en potenciar la juventud y la luminosidad de la mirada haciendo uso de un remedio casero de aceite de coco para las ojeras.